Resulta que despues de haber crecido en un entorno muy identificado con nuestras costumbres y vida social, muchas veces hemos dejado pasar de largo nuestras propias formas de expresion, solo basta con mirar un poco mas alla, para poder notar lo agradable, gracioso, o terrible de esos detalles que le dan a un país su identidad, personalmente adoro la identidad del mio, con sus pros y contras, con sus "endenantes" y "ahorititas" , palabras que surgen de un diario acontecer,pero que habiendose aplicado en otras tierras, resultan pintorescas para oidos virgenes de nuestras expresiones. Cambiando un poco el tema, he lamentado muchisimo la "destruccion" de mis formas de lenguaje y de un castellano muy rico y delicioso que intentamos manejar en Bolivia, ante un castellano iberico que no ha hecho mas que involucionar no se desde cuando. Lo triste es ver a mis compatriotas utilizando (entre sus paisanos) terminos que provienen del mal español que domina en estas tierras de su majestad Don Juan Carlos Alfonso Víctor María de Borbón y Borbón, es un caos, como si nuestra gente hubiera perdido esa identidad ni bien pisar territorio extranjero, si bien, es importante "conocer" las expresiones españolas para un mejor entendimiento con los "aborigenes", esto no significa cambiarse el chip permanentemente y oirse como un imbecil.
Un dia un compatriota me dijo que estando en España ya 5 años, deberia hablar diferente, le respondi que cuando llegué, ya sabia hablar castellano...
En fin, pienso que el respeto a nuestro pais nos lo debemos ganar uno a uno, con esos detalles que los de afuera noten y sepan que mi Bolivia, es especial y unica.
Que viva Bolivia!
